“In memoriam”, Roberto Pérez López
Publicada el: 17 de abril de 2011
Roberto Pérez López era –todavía lo es, y lo será siempre en la memoria de quienes le tratamos- uno de esos profesionales del Derecho cuya modestia era directamente proporcional a sus conocimientos (lo contrario a lo propio de esa hoguera de las vanidades en que se ha convertido la abogacía).
Su gesto amable y verbo tenue no dejaba traslucir la crispación ni el apasionamiento gestual. Defendía su tesis con la tranquilidad que le daba el profundo conocimiento de la materia en liza, pero sin infravalorar al rival ni pretendiendo sermonearle, al revés que ciertos “popes” del Derecho de indisimulada impostura.
Roberto era una “rara avis”, que supo subir y bajar en la carrera administrativa con naturalidad, anteponiendo su vocación de servicio a cualquier interés personal. Sería por su alma de jurista y no de arribista, la que se hacía evidente en las controversias sosegadas que tuvimos como defensores de intereses contrapuestos.
Quizás ahora Roberto, allá, en el cielo de los que creyentes, se apene de no haber creado escuela en el Sergas. Si es así, admirado Roberto, no te preocupes, pues la excelencia y la bonhomía, de las que hiciste gala en vida, son semillas que raramente crecen en los terrenos pedregosos de