La sociedad depresiva.
Publicada el: 18 de septiembre de 2010
Efectivamente, tiene razón de Benoist cuando justifica ese pensamiento al decir que se percibe una mayor vulnerabilidad frente a los riesgos de una sociedad que cada vez produce e innova más. Y la percepción generalizada de la imposibilidad de blindarse frente a las amenazas del progreso genera una sensación de depresión colectiva y, añado, también una ansiedad por demandar de los operadores jurídicos mecanismos de reacción frente a esas amenazas, en una búsqueda a ultranza de la reparación del daño, especialmente de eso que se llama daño moral.