Fumando espero
Publicada el: 29 de enero de 2011
Y es que la nueva Ley antitabaco coloca a los fumadores al otro lado de los “alegres ventanales”, a la intemperie del frío invierno, en la acera, ateridos los pobres mientras apuran deprisa el cigarrillo sin la delectación de
Y así sigue el tango: “Mientras fumo, mi vida no consumo porque flotando el humo me suelo adormecer... Tendida en la chaisse longue soñar y amar”. Pero más que somnolencia el humo del tabaco provoca cáncer y tiende a sus víctimas no en divanes sino en camas de hospitales.
Y continúa de forma arrebatadora: “Dame el humo de tu boca. Anda, que así me vuelvo loca … sintiendo ese calor del humo embriagador”. Tampoco es de psiquiatra su tratamiento, pero sí de neumólogos, oncólogos, cirujanos, radiólogos, cardiólogos y muchos más, con alto coste sanitario.
Y para convencernos de sus benéficos efectos canta: “Y aunque parece que el cuerpo languidece, tras el cigarro crece su fuerza, su vigor”. Efecto placebo porque igual que las drogas duras el tabaco provoca dependencia y la necesidad imperiosa e inevitable de consumir compulsivamente.
Y termina con este rotundo final: “Por eso estando mi bien es mi fumar un edén”. Ahí no le falta razón porque estando legalizado el negocio del tabaco (por eso es un bien), incluso subvencionado su cultivo, no se puede restringir la libertad de consumo en determinados espacios públicos (el edén).
Porque más allá de anacrónicos clubes de fumadores la norma debería permitir la libertad de establecimiento de bares, restaurantes o discotecas de fumadores, asumiendo libremente el empresario su condición de “fumador pasivo”.
Pero lo más sangrante de la reforma operada son los perjuicios derivados a quienes en su momento adaptaron sus negocios para dotarlos de espacios reservados para fumadores, que ahora sin amortizar, carecen de utilidad.
Un ejemplo de libro de eso que se denomina la responsabilidad del Estado legislador. El castigo judicial puede ser severo con indemnizaciones millonarias. Yo, siendo malvado, pondría ya a la Sra. Pajín a cantar “Fumando espero”